Perhaps resisting ideology means attempting to do without binary distinctions and assessments. Rather than taking positions for or against broad categories—“student organizing,” “reformism,” “violence,” even “ideology”—we could see each of these as composed of conflicting currents and tendencies. In this view, the role of theory is not to endorse or condemn, but to study this nuanced interplay of forces in order to inform strategic action.
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jueves, 3 de octubre de 2013
Against Ideology?
sábado, 14 de septiembre de 2013
Desafío Temático III: Hablá sobre una causa especial para vos y contá por qué.
De nuevo me atraso con este Desafío Temático pero esta vez tiene una razón, más allá de lo que me mantuvo ocupado durante la semana: sinceramente no sé de qué carajo hablar.
¿Una causa especial? Me considero bastante anti-causas como para hablarles de una por la que me mueva demasiado. No solo no milito sino que estoy bastante en contra de la militancia como se la entiende generalmente. Tampoco me mueven demasiados pelos la mayoría de los temas que suelen dividir al mundo porque tengo una posición bastante clara al respecto pero dudo de que mi pobre participación en algo vaya a cambiar el destino del mundo así que prefiero simplemente seguir con mi vida, disfrutarla lo más posible y preocuparme lo menos posible sobre el mundo y la vida porque, al fin y al cabo, yo no puedo hacer nada para cambiarlo.

Quizás la causa con la que más comprometido estoy, y esto a un nivel puramente teórico, sea la de "la libertad". Es una fea palabra "libertad" porque no significa nada y no me gusta usar términos así. Para ser más claros, digamos que le tengo mucho cariño a la idea de un mundo en dónde no se use la violencia explícita para organizar la sociedad. Soy lo que se llama un libertario tirando hacía un lado bastante anarquista (aunque, a diferencia de la mayoría de los anarquistas, creo que el mercado es una buena base en la cual apoyarse para la organización social). A pesar de la connotación derechosa que tiene la palabra liberalismo en Argentina, coincido con muchos zurdos radicales en varias cosas: eliminación del matrimonio estatal, legalización de las drogas, dejar de ayudar a las empresas con subsidios, menos estado policial, reconocimientos de los derechos de todas las minorías, abertura de fronteras, etc. Así como ese es el lado zurdo, hay muchas cosas que podrían ser consideradas de derecha en mi pensamiento, aunque yo no lo veo así: desregularización del mercado de armas, dejar de (eventualmente) dar subsidios y protecciones especiales a las minorías, privatización de la salud y la educación; etc.
Dentro de esta llamada "causa" (detesto ese término) hay temas que me tocan más que otros. Al movimiento LGTB siempre le tuve mucho cariño y, sinceramente, no sé por qué. Quizás porque es un objetivo totalmente alcanzable para estas épocas el de la eliminación de la discriminación contra las personas LGTB. Entiendasé: estamos lejos de eliminar el concepto de gobierno, pero el matrimonio gay se aprobó ya hace unos años (aunque aún queda mucho por hacer). La legalización de las drogas también es otro objetivo que me parece alcanzable a corto plazo y bastante importante, aunque le tengo poco cariño a la cultura hipposa que crece como hierba (pun!) alrededor del movimiento por la legalización de la marihuana.
Pero como dije, ¿vale esto como causa? No milito, no ayudo, no voy a ningún lado, no trato de cambiar leyes. En una discusión con mis amigos quizás defienda mis ideas, pero toda mi militancia queda ahí. Este post, entonces, viene bien para un sábado a la mañana: ojalá nadie lo lea. No es muy interesante y, además, no me gusta hablar de "causas" como si yo supiese que es mejor para el mundo. Perdón: saberlo quizás sea posible. Ahora, cambiarlo... eso no está en las manos de uno. Por la vía política uno se mete, por definición, en el sistema y no puede cambiar las cosas radicalmente; por las otras vías se suele llegar solo a la destrucción y a la condena social. ¿Entonces? Mejor me tomo una birra.
¿Una causa especial? Me considero bastante anti-causas como para hablarles de una por la que me mueva demasiado. No solo no milito sino que estoy bastante en contra de la militancia como se la entiende generalmente. Tampoco me mueven demasiados pelos la mayoría de los temas que suelen dividir al mundo porque tengo una posición bastante clara al respecto pero dudo de que mi pobre participación en algo vaya a cambiar el destino del mundo así que prefiero simplemente seguir con mi vida, disfrutarla lo más posible y preocuparme lo menos posible sobre el mundo y la vida porque, al fin y al cabo, yo no puedo hacer nada para cambiarlo.

Quizás la causa con la que más comprometido estoy, y esto a un nivel puramente teórico, sea la de "la libertad". Es una fea palabra "libertad" porque no significa nada y no me gusta usar términos así. Para ser más claros, digamos que le tengo mucho cariño a la idea de un mundo en dónde no se use la violencia explícita para organizar la sociedad. Soy lo que se llama un libertario tirando hacía un lado bastante anarquista (aunque, a diferencia de la mayoría de los anarquistas, creo que el mercado es una buena base en la cual apoyarse para la organización social). A pesar de la connotación derechosa que tiene la palabra liberalismo en Argentina, coincido con muchos zurdos radicales en varias cosas: eliminación del matrimonio estatal, legalización de las drogas, dejar de ayudar a las empresas con subsidios, menos estado policial, reconocimientos de los derechos de todas las minorías, abertura de fronteras, etc. Así como ese es el lado zurdo, hay muchas cosas que podrían ser consideradas de derecha en mi pensamiento, aunque yo no lo veo así: desregularización del mercado de armas, dejar de (eventualmente) dar subsidios y protecciones especiales a las minorías, privatización de la salud y la educación; etc.
Dentro de esta llamada "causa" (detesto ese término) hay temas que me tocan más que otros. Al movimiento LGTB siempre le tuve mucho cariño y, sinceramente, no sé por qué. Quizás porque es un objetivo totalmente alcanzable para estas épocas el de la eliminación de la discriminación contra las personas LGTB. Entiendasé: estamos lejos de eliminar el concepto de gobierno, pero el matrimonio gay se aprobó ya hace unos años (aunque aún queda mucho por hacer). La legalización de las drogas también es otro objetivo que me parece alcanzable a corto plazo y bastante importante, aunque le tengo poco cariño a la cultura hipposa que crece como hierba (pun!) alrededor del movimiento por la legalización de la marihuana.
Pero como dije, ¿vale esto como causa? No milito, no ayudo, no voy a ningún lado, no trato de cambiar leyes. En una discusión con mis amigos quizás defienda mis ideas, pero toda mi militancia queda ahí. Este post, entonces, viene bien para un sábado a la mañana: ojalá nadie lo lea. No es muy interesante y, además, no me gusta hablar de "causas" como si yo supiese que es mejor para el mundo. Perdón: saberlo quizás sea posible. Ahora, cambiarlo... eso no está en las manos de uno. Por la vía política uno se mete, por definición, en el sistema y no puede cambiar las cosas radicalmente; por las otras vías se suele llegar solo a la destrucción y a la condena social. ¿Entonces? Mejor me tomo una birra.
miércoles, 17 de abril de 2013
Obama y el doble discurso sobre la violencia
El resultado de las bombas en Boston ayer ya es sabido por todos: 3 muertos, uno de ellos de ocho años, y centenas de heridos, varios de ellos en gravedad. Estados Unidos está entero de duelo.
[caption id="attachment_1040" align="aligncenter" width="220"]
Kokesh[/caption]
Pero, ¿hasta qué punto es válido el duelo? Adam Kokesh, activista anti-bélico, veterano de guerra y presentador de este canal de youtube libertario subió ayer un video muy crítico de todo lo que se está viviendo en Estados Unidos luego de los ataques en Boston.
El video empieza así:
El principio ya choca, sobre todo sabiendo que Kokesh es estadounidense y que, en esa nación amante de la victimización, decir cosas así te puede significar dejar de hablar con la mitad de tus amigos.
¿Y por qué decirle esto a una nación que, en este momento, esta conmocionada? Kokesh es claro: quiere poner las cosas en perspectiva.
El activista nos da los siguientes datos:
Básicamente, todo va a: "El gobierno estadounidense mata gente por todo el mundo con nuestra plata y nuestro apoyo y vos llorás por tres personas que murieron. Por más trágico que eso sea, no es comparable".
Pero tendríamos que hacer una limpieza, una pasada en limpio. Hay cosas en esa lista de calamidades que no son del todo aceptables como argumento contra los Estados Unidos. Quizás sirvan como datos de color, pero hay una, la principal, que es evidente. Y que es la más sombría también, pues tiene directa participación del actual "lider del mundo libre".
Por ejemplo, los 500.000 niños iraquíes podrían haber muerto igual. Son sanciones económicas. Muertes indirectas. Es un número estimativo. Vamos a tacharlo.
Casi un millón y medio por la ocupación en Irak. "¡Ah, pero!", nos diría un pro-guerra, "sin la invasión quizás hubiese habido más, y si no más, los que vivían bajo el régimen vivían sin libertad para nada". Discutible y probablemente no es cierto, pero vamos a tacharlo.
El Black Monday en Irak, del que no se habló en los medios estadounidenses y se mencionó poco y nada en los demás, tapado por la "masacre" de Boston. Esto es más una vergüenza mediática que culpa de los EE.UU.
Pero todavía están ahí los VANT. Vehículos aéreos no tripulados. Drones, como se los conoce en inglés. Hay un montón de lios con los VANT. Algunos dicen que son "la peor forma de guerra de todos los tiempos, excepto por todas las demás", mientras que otros dicen que "los drones matan 50 civiles por terrorista". Pero acá la cifra importante es otra: los 175 niños que la política exterior EE.UU mató. Los 175 niños son sí o sí víctimas civiles. No hay vuelta que darle ahí. E incluso si los drones son la mejor forma de hacer guerra, eso no hace que la guerra causada por los Estados Unidos sea buena.

Y acá es donde el doble discurso, señalado también en el video de Kokesh, se hace evidente.
El martes, en un discurso, Obama dijo, entre otras cosas:
El responsable directo de la muerte de al menos 175 niños por medio de aviones no tripulados llama a unas bombas en una mochila un "acto de terrorismo" y asegurar que "se llevara a los responsables ante la justifica". Si eso es así, Obama, ¿qué tendría que hacer la justicia con vos?. El nivel de cinismo llegó al punto de que el mismo Nobel de la Paz se puede jactar de ser un asesino de niños. Y no solo eso. Un asesino de niños que se cree con derecho a juzgar a otros asesinos. Coherencia, señores, ante todo. Coherencia ante todo.
Obama, como comandante en jefe de todas las fuerzas armadas estadounidenses, es responsable institucional de todas estas muertes. Obama, el ídolo de la izquierda trucha internacional, es el asesino de 175 niños. Obama, que representaba el cambio, el aire fresco... sí, ese. El mismo que era "el primer presidente negro de los Estados Unidos". Desgraciadamente los racistas no tenían razón. Desgraciadamente somos todos iguales, no importa la raza.
Es curioso ver como hay gente que aún puede tener fe en el estado después de todas las decepciones que nos dio. Pero eso es tema para otro post.
Tanto en el video de Kokesh como en otros foros de izquierda anti-estatista la culpa de los crímenes de la administración de Obama recae en la gente.
Y acá se plantea una pregunta interesante. ¿La culpa es de los gobernantes por engañar al pueblo o del pueblo por dejarse engañar?
Seguramente la cuestión no es tan dicotómica como la quiero presentar, pero sirve para hacer un análisis muy curioso.
Comparemos la situación a la de un esposo abusador. ¿De quien es la culpa, de la mujer, que se queda, o del hombre, que ataca? Casi todos vamos a decir que es la culpa del hombre, y que la mujer, heroína al final de la historia, logra salirse de las cadenas del ciclo abusivo.
¿Por qué no aplicamos la misma lógica a la relación gobierno-ciudadano? El gobierno de Obama vino como un gobierno de cambio. Su slogan era "Change". Prometía ser eso. No podemos culpar a la humanidad de no darse cuenta de la noche a la mañana que los gobiernos son una farsa política. No tiene sentido. Aunque el video de Kokesh me gusta mucho, porque dice algunas verdades, tendría que cambiar su foco: la culpa no es de la gente, una víctima más de la violencia estatista. La culpa es del gobierno.
Por otro lado, tenemos también que preguntarnos: ¿Tiene tanto de malo que nos importe más un chico muerto en nuestro país que 100, 200 o 300 en un país a 20.000km de distancia?
Quizás esa sea una respuesta natural del ser humano. La cercanía crea lazos. Los grupos crea lazos. Sí, las naciones son lazos artificiales, pero son lazos que están. ¿Por qué negarlos?
La crítica sin el paso previo de analizar qué lleva a la gente a llorar por un chico muerto en Boston y no por cientos muertos en Medio Oriente es contraproducente. Todos se ofenden, y con algo de razón.
Como dije: Quizás las naciones sean un concepto tonto, pero están y la gente se siente unida por la nacionalidad. Es algo humano.
Esto no significa que Obama no debería ser juzgado como lo que es. Con esto solamente quiero decir que el pueblo estadounidense tiene quizás derecho a hacer duelo por un chico muerto en su suelo y no por 200 muertos en suelo extranjero. Es, quizás, algo natural.
Pero eso no quiere decir que cuando llegue el momento de juzgar racionalmente no pensemos con lógica: un chico blanco no vale más que doscientos marrones, no nos confundamos.
La hipocresía.
[caption id="attachment_1040" align="aligncenter" width="220"]

Pero, ¿hasta qué punto es válido el duelo? Adam Kokesh, activista anti-bélico, veterano de guerra y presentador de este canal de youtube libertario subió ayer un video muy crítico de todo lo que se está viviendo en Estados Unidos luego de los ataques en Boston.
El video empieza así:
Querido estadounidense que cree que esta Masacre de Boston es gran cosa pero nunca protestó en contra de la guerra o del estado policial: andate a la puta, vos, ignorante, engañado, egoísta, miope, patriota pelotudo.
El principio ya choca, sobre todo sabiendo que Kokesh es estadounidense y que, en esa nación amante de la victimización, decir cosas así te puede significar dejar de hablar con la mitad de tus amigos.
¿Y por qué decirle esto a una nación que, en este momento, esta conmocionada? Kokesh es claro: quiere poner las cosas en perspectiva.
El activista nos da los siguientes datos:
- En Irak, desde el final de la Guerra del Golfo hasta la ocupación del 2003, las sanciones económicas al país llevaron a la muerte de 500.000 niños iraquies.
- Casi un millón y medio murieron en Irak gracias a la ocupación estadounidense en Irak.
- Black Monday en Irak: 55 muertos y casi 300 heridos en Irak, el mismo lunes que la Masacre de Boston.
- Durante la administración de Obama, sus VANT han atacado Pakistán 208 veces y tienen como consecuencia entre 2.496 y 3.202 muertos, de los cuales 175 fueron niños, y al menos 1.196 heridos.
¿Pasada en limpio?
Básicamente, todo va a: "El gobierno estadounidense mata gente por todo el mundo con nuestra plata y nuestro apoyo y vos llorás por tres personas que murieron. Por más trágico que eso sea, no es comparable".
Pero tendríamos que hacer una limpieza, una pasada en limpio. Hay cosas en esa lista de calamidades que no son del todo aceptables como argumento contra los Estados Unidos. Quizás sirvan como datos de color, pero hay una, la principal, que es evidente. Y que es la más sombría también, pues tiene directa participación del actual "lider del mundo libre".
Por ejemplo, los 500.000 niños iraquíes podrían haber muerto igual. Son sanciones económicas. Muertes indirectas. Es un número estimativo. Vamos a tacharlo.
Casi un millón y medio por la ocupación en Irak. "¡Ah, pero!", nos diría un pro-guerra, "sin la invasión quizás hubiese habido más, y si no más, los que vivían bajo el régimen vivían sin libertad para nada". Discutible y probablemente no es cierto, pero vamos a tacharlo.
El Black Monday en Irak, del que no se habló en los medios estadounidenses y se mencionó poco y nada en los demás, tapado por la "masacre" de Boston. Esto es más una vergüenza mediática que culpa de los EE.UU.
Pero todavía están ahí los VANT. Vehículos aéreos no tripulados. Drones, como se los conoce en inglés. Hay un montón de lios con los VANT. Algunos dicen que son "la peor forma de guerra de todos los tiempos, excepto por todas las demás", mientras que otros dicen que "los drones matan 50 civiles por terrorista". Pero acá la cifra importante es otra: los 175 niños que la política exterior EE.UU mató. Los 175 niños son sí o sí víctimas civiles. No hay vuelta que darle ahí. E incluso si los drones son la mejor forma de hacer guerra, eso no hace que la guerra causada por los Estados Unidos sea buena.
El doble discurso.

Y acá es donde el doble discurso, señalado también en el video de Kokesh, se hace evidente.
El martes, en un discurso, Obama dijo, entre otras cosas:
"Este fue un acto atroz y cobarde de terrorismo"
El responsable directo de la muerte de al menos 175 niños por medio de aviones no tripulados llama a unas bombas en una mochila un "acto de terrorismo" y asegurar que "se llevara a los responsables ante la justifica". Si eso es así, Obama, ¿qué tendría que hacer la justicia con vos?. El nivel de cinismo llegó al punto de que el mismo Nobel de la Paz se puede jactar de ser un asesino de niños. Y no solo eso. Un asesino de niños que se cree con derecho a juzgar a otros asesinos. Coherencia, señores, ante todo. Coherencia ante todo.
Obama, como comandante en jefe de todas las fuerzas armadas estadounidenses, es responsable institucional de todas estas muertes. Obama, el ídolo de la izquierda trucha internacional, es el asesino de 175 niños. Obama, que representaba el cambio, el aire fresco... sí, ese. El mismo que era "el primer presidente negro de los Estados Unidos". Desgraciadamente los racistas no tenían razón. Desgraciadamente somos todos iguales, no importa la raza.
Es curioso ver como hay gente que aún puede tener fe en el estado después de todas las decepciones que nos dio. Pero eso es tema para otro post.
La responsabilidad del pueblo.
Tanto en el video de Kokesh como en otros foros de izquierda anti-estatista la culpa de los crímenes de la administración de Obama recae en la gente.
Y acá se plantea una pregunta interesante. ¿La culpa es de los gobernantes por engañar al pueblo o del pueblo por dejarse engañar?
Seguramente la cuestión no es tan dicotómica como la quiero presentar, pero sirve para hacer un análisis muy curioso.
Comparemos la situación a la de un esposo abusador. ¿De quien es la culpa, de la mujer, que se queda, o del hombre, que ataca? Casi todos vamos a decir que es la culpa del hombre, y que la mujer, heroína al final de la historia, logra salirse de las cadenas del ciclo abusivo.
¿Por qué no aplicamos la misma lógica a la relación gobierno-ciudadano? El gobierno de Obama vino como un gobierno de cambio. Su slogan era "Change". Prometía ser eso. No podemos culpar a la humanidad de no darse cuenta de la noche a la mañana que los gobiernos son una farsa política. No tiene sentido. Aunque el video de Kokesh me gusta mucho, porque dice algunas verdades, tendría que cambiar su foco: la culpa no es de la gente, una víctima más de la violencia estatista. La culpa es del gobierno.
Lo humano.
Por otro lado, tenemos también que preguntarnos: ¿Tiene tanto de malo que nos importe más un chico muerto en nuestro país que 100, 200 o 300 en un país a 20.000km de distancia?
Quizás esa sea una respuesta natural del ser humano. La cercanía crea lazos. Los grupos crea lazos. Sí, las naciones son lazos artificiales, pero son lazos que están. ¿Por qué negarlos?
La crítica sin el paso previo de analizar qué lleva a la gente a llorar por un chico muerto en Boston y no por cientos muertos en Medio Oriente es contraproducente. Todos se ofenden, y con algo de razón.
Como dije: Quizás las naciones sean un concepto tonto, pero están y la gente se siente unida por la nacionalidad. Es algo humano.
Esto no significa que Obama no debería ser juzgado como lo que es. Con esto solamente quiero decir que el pueblo estadounidense tiene quizás derecho a hacer duelo por un chico muerto en su suelo y no por 200 muertos en suelo extranjero. Es, quizás, algo natural.
Pero eso no quiere decir que cuando llegue el momento de juzgar racionalmente no pensemos con lógica: un chico blanco no vale más que doscientos marrones, no nos confundamos.
domingo, 24 de marzo de 2013
Traducciones: Mercados, no capitalismo.
Me propuse hacer algo interesante, y después de pensarlo me decidí a traducir este librazo que leí hace cosa de un año: Markets, not Capitalism.
[caption id="attachment_940" align="alignright" width="248"]
La portada es hermosamente sobria.[/caption]
Markets, not Capitalism es una colección de ensayos, posts y otros escritos hechos por anarquistas individualistas desde el Proudhon hasta la actualidad. Toca un montón de temas de la tradición anarquista como la propiedad intelectual, el medio ambiente, la economía, el socialismo y, por supuesto, la propiedad. Todo de una manera muy amena y generalmente muy fácil de entender.
Voy a tratar de sumar, cuando pueda, algún tipo de información sobre al autor del artículo en sí, una pequeña biografía y foto. Para darle algo de valor agregado a la traducción.
Me voy a imponer un tipo de orden y regularidad con esto. Ligero, pero orden al fin. Todos los miercoles a las 17:00 (GTM -3:00) un artículo nuevo va a salir. El libro se divide en 48 artículos sin contar la introducción (que vendrá pegada al primer artículo).
Eso no es bueno para mis expectativas de terminar de hacer algo con un libro antes de los 20 (escribirlo quedó lejos de mis capacidades, pero traducir... uno siempre puede traducir), así que si veo que puedo publicaré dos por semanas. El problema es el compromiso: prefiero ir lento y seguro antes que prometer cosas que no voy a cumplir.
En fin, algo es seguro: ¡este miércoles sale la introducción y primer artículo de "Mercados, no capitalismo" en español! Estén atentos los amantes de las discusiones, la política, la economía, el anarquismo, la filosofía y... básicamente cualquier cosa.
Por cierto, para los que no gusten de esperar y quieran leer el libro en inglés, lo tienen acá.
[caption id="attachment_940" align="alignright" width="248"]

Markets, not Capitalism es una colección de ensayos, posts y otros escritos hechos por anarquistas individualistas desde el Proudhon hasta la actualidad. Toca un montón de temas de la tradición anarquista como la propiedad intelectual, el medio ambiente, la economía, el socialismo y, por supuesto, la propiedad. Todo de una manera muy amena y generalmente muy fácil de entender.
Voy a tratar de sumar, cuando pueda, algún tipo de información sobre al autor del artículo en sí, una pequeña biografía y foto. Para darle algo de valor agregado a la traducción.
Me voy a imponer un tipo de orden y regularidad con esto. Ligero, pero orden al fin. Todos los miercoles a las 17:00 (GTM -3:00) un artículo nuevo va a salir. El libro se divide en 48 artículos sin contar la introducción (que vendrá pegada al primer artículo).
Eso no es bueno para mis expectativas de terminar de hacer algo con un libro antes de los 20 (escribirlo quedó lejos de mis capacidades, pero traducir... uno siempre puede traducir), así que si veo que puedo publicaré dos por semanas. El problema es el compromiso: prefiero ir lento y seguro antes que prometer cosas que no voy a cumplir.
En fin, algo es seguro: ¡este miércoles sale la introducción y primer artículo de "Mercados, no capitalismo" en español! Estén atentos los amantes de las discusiones, la política, la economía, el anarquismo, la filosofía y... básicamente cualquier cosa.
Por cierto, para los que no gusten de esperar y quieran leer el libro en inglés, lo tienen acá.
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